- Precalienta el horno a 180ºC
- Derrite el chocolate al baño María
- Bate las yemas de huevo, y bate el queso fresco, mézclalo.
- Mezcla el chocolate con el queso y las yemas de huevo batidas
- Monta las claras a punto de nieve
- Mezcla la masa de chocolate con las claras mediante movimientos envolventes
- Échalo al molde y al horno durante unos 40-50 minutos al baño maría a 150ºC.
- Deja que atempere un poco antes de desmoldar, adorna con crema de cacahuete y un poco más de chocolate derretido
Está muy suave, ¡se te derrite en la boca!
No lleva harinas ni azúcar añadidos, tiene el toque amargo del chocolate, no es un postre dulce.